Escribir.Lo que una es o no, muchas veces sigue en el rastro de pensamientos, sentimientos, deseos, emociones.
Era tarde y entonces sólo entonces pensó que todo estaba por decidir. Nunca lo había pensado de esa manera. "Desaparecer de sí , Una tentación contemporánea" de David Le Breton sociólogo y antropólogo empieza recogiendo la cita de Jean Jacques Rousseau : "Todo ha acabado para mí en la tierra.Ya no me pueden hacer ni bien ni mal ...(...) , tranquilo en el fondo del abismo (...) pero impasible como Dios mismo".
Hay muchas formas de desprenderse de una misma , de desaparecer de dejar de ser una persona, de forma discreta, de desaparecer de la existencia , sin dejar dirección, de inventarse de nuevo como ficción de una misma como Remo Bodei en "Imaginar otras vidas , Realidades , proyectos y deseos" nos cuenta.El hecho de desprenderse , desaparecer representa una tentación para este individualismo contemporáneo.
Hay muchos autores que recogiendo la tradición antigua hablan de la niña o el niño interior como quien de un fluir líquido , de un recorrido psíquico-corporal tierno el ser humano , acaba convirtiéndose en un caballero con coraza, una dama con corsé , un rostro con máscara. Y a medida que pasa el tiempo se acumula en su exterior capas y capas de yoes múltiples ( penas, dolores, prejuicios, egocentrismos, narcisismos, emociones, traumas, roturas, abandonos, malestares..).
No te quiero ya , vete de una vez ....gritaba mientras se comía un empalagoso doonut de chocolate y fresa.. (que tía tan mierda que soy) .Se refería como tantas otras veces a el espejo que le observaba cada día de su puñetera vida.
No te quiero ya , vete de una vez ....gritaba mientras se comía un empalagoso doonut de chocolate y fresa.. (que tía tan mierda que soy) .Se refería como tantas otras veces a el espejo que le observaba cada día de su puñetera vida.
Nietzsche recogiendo esta idea que podríamos encontrar ya en el budismo, orfismo, ... plantea el devenir eterno del tiempo a través de la metáfora lingüística de la niña que juega frente al mar sin tener consciencia alguna de la inmensidad oceánica de la vida y sus peligros infinitos o no. Cuando la niña se convierte en grande se aleja de la orilla y entonces empieza a tener miedo, se agarra a tantas cosas para no volverse cercana de nuevo a ese momento inicial inocente e ingenuo t.
El placer de vivir no resulta fácil de encontrar. Claro que las rutinas convierten la monotonía en una repetición mántrica que parece alejarnos en el instante de cierta descarga interior. ¿Cómo escapar de la velocidad,la competitividad, la eficacia, la necesidad imperiosa del ahora, sin sentirnos insatisfechas ?
La responsabilidad de lo que nos hacemos de nosotras mismas asumiendo la libertad que nos encontramos nos sitúa frente a nuestra única autoridad , y nos convierte en seres que intentamos ingenuamente "salvarnos". Hemos sin embargo dejado de ser transparentes para volvernos más opacos , más cerrados en nuestros yoes, en nuestros hogares, en nuestras virtualidades. No hay relaciones con las otras si no las forzamos nosotras generando una resistencia para encontrar el vínculo social.
Ese hecho de desconnexión con las demás impide conocer , aunque genera información , la otra está alejada aunque está presente. Lo diverso se unifica y particulariza porque la vinculación no es en absoluto moral o ética , sólo exclusivamente contextual o ambiental o circunstancial .