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domingo, 26 de mayo de 2013

EL TIEMPO DEBERÍA JUBILARSE



Siempre me he preguntado de que manera se aprende a dejar de trabajar cuando eso del trabajo no deja de ser una forma de gastar el tiempo y la vida con obligaciones sociales. Alguien dijo hace tiempo que el trabajo dignifica. En ese trabajar se nos dirige la acción hacia la productividad social de un modelo que nos determina la validez personal por aquello que producimos. 
Mi reflexión viene por lo que sucede cuando ya dejamos de trabajar , o sea , cuando nos jubilamos del trabajo no de la vida todavía. Ahora con la crisis se pueden observar numerosos letreros y carteles que exponen en forma de reclamo "POR JUBILACIÓN 10 % DE REBAJA SOBRE LOS PRECIOS" . Esta idea que no deja de ser un incentivo más del marqueting comercial actual me produce cierta reflexión sobre el tema. ¿Si yo me jubilara no  desearía prácticamente regalar todo el interior de mi negocio para dar y ofrecer felicidad a los otros ya que dejo este mundo productivo ?  En primer lugar uno se pregunta porque únicamente un 10 por ciento cuando se abandona el lugar habitual y se vende toda la mercancía. En segundo lugar uno se pregunta si cuando uno deja de trabajar le importa mucho eso de continuar teniendo dinero y más dinero para pasar sus últimos días. En tercer lugar uno que ha trabajado en algo que le ha gustado -cosa rara en la mayoría de los casos- no le gustaría hacer felices a quienes ahora van a dar la posibilidad de que uno se jubile con algo de dinero para el resto de su vida? . 
Claro que eso del tiempo ahora es algo que ocurre muy deprisa tanto que mientras uno escribe esto mismo parece que los minutos y las horas le apremian para acabar este domingo más de su vida. Y es que la relación con ese tiempo que vivimos ha empezado a ser algo que conviene evitar tal como lo hacemos. La inmediatez no permite en la práctica nada porque obliga a quemar constantemente los cartuchos de ideas,mercancías, actos, ... Estamos atrapados por esa relación imperativa que nos obliga constantemente a programar, gestionar -maldita palabra de estos tiempos-, a organizar nuestra vida y nuestro mundo. Sin embargo precisamente eso último pasa por encima de la vida propia ..¿Tenemos una vida propia ? - me pregunto cuando parece que hay que ganar al tiempo sin que ese como decía A.Huxley en su novela " El tiempo debería detenerse" ed Edhasa, nos proteja de nosotros mismos. La gratuidad de los actos, de las palabras pienso que deberían conseguir que nos relacionemos con esta temporalidad de otra manera ... se trata de ofrecernos a nosotros mismos una relación no comercial con ese gasto que ofrece el tiempo. Quizás se trata de dejar de pensarnos como tiempo gastado o invertido con nosotros mismos puede que el trabajo recupere un sentido más humano. Una máquina no tiene tiempo por lo que deberíamos pensar que en la relación con nosotros mismos abandonarse a la vida y no al mundo como algo que nos condiciona frente a la productividad puede que sea una forma de existir necesaria hoy. Jubilarse puede que sea este momento para olvidar que el tiempo y la productividad van unidos y si no conviene descubrir a los yayoflautas, los voluntarios de alimentos para los sin hogar, los voluntarios a tantas causas perdidas, etc etc..

Para seguir reflexionando sugiero que lean el post de Materiales para pensar relacionado con el tiempo. Hablar de presente,pasado y futuro en el fondo tal como se sugiere en relacionarse con esos procesos de construcción y reconstrucción con la realidad pero esa no deja de estar configurada por la dirección social y política que nos determina y condiciona. La idea aristotélica del acto y la potencia permiten hablar de como salvar la configuración del ser estático de Parménides o del devenir del cambio de Heráclito. Este último autor nos dirige a una visión dialéctica del mundo que nos permite entender que el tiempo es vivido como un proceso , como un caminar en esa mirada hacia la vida no el mundo. Intento diferenciar ambos espacios vida y mundo porque me parecen ambos que nos permiten hablar de algo que nos relaciona con nosotros mismos o algo que nos relaciona con los otros. Una diferencia que significaría que en esa temporalidad que nos vemos sometidos las cosas suceden de manera distinta en tanto ofrezcamos lo que somos hacia nuestra realización personal y no hacia la productividad social que nos obliga a tener una relación económica con nosotros mismos. EL tiempo es oro dicen los unos, el tiempo no existe dicen los otros, el tiempo absoluto o el tiempo relativo, el tiempo de la vereda, el tiempo de la vida, la percepción del tiempo , el huir del tiempo , el banco del tiempo, ..sin embargo hacemos con este nombre lo que no podemos hacer con la existencia : olvidarnos de que existe.

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