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viernes, 2 de septiembre de 2022

¿EXISTE UNA VERDAD SECUESTRADA ?

 

En los cuadernos que publica "Cristianisme i Justícia" número 224 , Joan Garcia del Muro, F,Javier Vitoria y Sonia Herrero presentan sus aportaciones en unas Jornadas sobre; Pensamiento, Fe i Justicia. 

La temática sobre la que tratan es el concepto de Verdad. Este concepto precisamente es uno de los que me ha obsesionado a lo largo de los años. En estos tiempos la verdad está cuestionada como un concepto que se pueda defender de forma absoluta. Por consiguiente se habla de la época de la Post verdad. Sin embargo estos tres autores han introducido una idea sugerente , el secuestro de la verdad. Al introducir esta idea ponen el acento en la dimensión ética y no sólo epistemológica. En tiempos de pandemia y de grandes cambios e incertidumbres económicas y climáticas, la relación que establecemos con la verdad resulta  importante. 

¿A qué llamamos verdad? ¿Resulta cierto que hemos perdido la verdad hoy? . Lee McYntyre en su libro " Posverdad/verdad" escrito en el 2018 intentó puntualizar sobre esta idea  nacida de la postmodernidad y del pensamiento débil, sostenido por autores como G. Vatimo y Lyotard . Bajo esta idea  se suceden otras muchas  ideas que puede que compliquen la claridad . La gente que sigue mi blog sabe que en los cafés filosóficos que venimos realizando en Barcelona planteamos el tema de la mentira. Una pregunta que obligaba a los participantes a diferenciar entre mentir o equivocarse  . Queda claro que la posverdad no seria un mentir sin más. La posverdad tiene claro su propósito que no es otro que faltar a la verdad sin desafiar autoridad alguna , sin determinar criterio de demarcación alguno que someta los hechos a ciertos parámetros de objetividad. 

García del Muro señala que la posverdad no sería sólo  pues una cuestión epistemológica o de sesgo cognitivo , sino también con implicaciones éticas por la relación que se establece entre el emisor y el receptor del mensaje. Por consiguiente nos señala que la verdad anda secuestrada . Al hablar de secuestro introduce la idea de una apropiación indebida de los hechos o las ideas . Una ausencia de verdad indica pues que no existe verdad alguna. Para ello,  recorre a la historiografía del concepto. Fue   en la Segunda Guerra Mundial y con la barbarie de Auschwitz cuando  se establece que se puede promover la maldad absoluta y de forma dogmática, absoluta, totalitaria. En este sentido la verdad se define como  violenta porque puede convertirse en fanática. Las Guerras de Religión son un claro ejemplo de esto  . Parece pues como sostenía la postmodernidad que conviene huir de estos fanatismos de la  verdad absoluta y totalitaria. Pero el resultado continua diciendo el autor,  es  la generación de un relativismo que encubre de nuevo el  totalitarismo cuando consigue l banalizarlo absolutamente todo.

En este sentido en base a la palabra libertad se acentúa un auténtico fanatismo y dogmatismo social y político. Ese totalitarismo digital de las redes sociales algorítmico totalmente pervierte incluso la idea de que sea necesario defender una verdad que no sean mis intereses y deseos personales. Por eso la posverdad no es la mentira , va más allá de esta. ¿Qué sucede cuando no hay verdad ? En el debate del todo vale , todo es opinable, todo es sugerible, se suceden algunas características de estos tiempos continua el autor : 

  • el desprestigiar hoy la racionalidad y su pensamiento 
  • el relativismo radicalizado 
  • la psicologización de las emociones 
  • el pragmatismo 

Todas estas características evidentes indican educativamente hablando el desprestigio del conocimiento y el ascenso de la información como intoxicación social. Como consecuencia de estas se sucede la falta de un pensar crítico, la incapacidad para adquirir un pensamiento propio , la desconfianza en lo extraño o extranjero , aquello que no coincide con uno mismo, y el acento de los sentimientos y emociones como parangón de estos tiempos. Siendo esclavos de las pasiones nos convertimos en fáciles consumidores manipulados por la publicidad mediática y política de nuestra época. El mismo ejemplo de la guerra actual entre Rusia y Ucrania nos advierte de esta realidad. Claro esto nos lleva a las puras especulaciones o interpretaciones sobre los hechos tal como ya avanzó Nietzsche. "No hay hechos únicamente interpretación de los hechos". El mismo fenómeno identitario es una prefabricación de intereses superpuestos. Si aquello verdadero es aquello que deseamos que sea verdadero , nos convertimos en dogmáticos de nuestras falsedades , de nuestras fakes news. Una decisión que no puede convertirse en un deseo a modo de buenismo o optimismo desmesurado.  En este sentido la democracia hoy está amenazada por esta idea que acabamos de exponer , la de creer que existe una verdad en función de la función placentera que me provoca o nos provoca y los deseos que nos satisface. Así los hechos están al margen de la verdad misma . Este alejamiento entre hechos y verdad como algo que se corresponde nos indica la falta hoy de autenticidad de la realidad. Convierte todo en un mundo simulado , un meta verso, una realidad fingida, afectada por una virtualidad aparente que se separa de la vida verdadera. 
En este sentido continua el autor la ética es una cuestión de regulación , de normas , de utilidad en función del parque humano de intereses mediáticos y bien dispuestos. Y lo peor de todo es que ese descrédito genera un estado nihilista y escéptico que dentro del narcicismo endogámico de los grupos, naciones, tribus no ofrece más que un monólogo insulso y aburrido entre la población . 
Siendo la verdad esta mercancía de intereses sometida a un mercado , como podría ser el caso de las mal llamadas vacunas para la covid , no nos quedaría más remedio que instalarnos en una ficticia comodidad . ¿Qué cosas nos afectan hoy de la realidad ? Creo que nada ni nadie , todo lo hemos convertido en post , en likes, en manifestaciones de amor o odio, en banalidad simple y pura de nuestra especie. SI Popper hablaba de la sociedad abierta y la sociedades cerradas , ahora más que nunca estamos encerrados en nosotros mismos . Incluso preferimos creer nuestras mentiras que nos permiten sentirnos en paz para vivir mejor.

Uno se pregunta si hoy que las plataformas de cine viven en nuestras casas no estamos bastante contaminados entre lo que vemos, lo que creemos ver, lo que realmente experimentamos luego. Parece pués que en esa farsa , esa ficción se confunde la realidad con la fantasiada deseada o soñada. Por consiguiente la estética prevalece a una ética interesada . Las formas en los tgestos se anteponen a los valores internos. El vecino sonríe para más tarde dejarte cuando tu no estás la entrada del portal sucio de barro.   

Finalmente el otro , los otros en esta relación de nosotros con la realidad se diluye , desaparece , y se deshumaniza con la posverdad. Dejan de importarnos los demás , esa alteridad molesta pero  resulta formalmente aceptable . 

Para ir concluyendo , la verdad hoy es una cosa de uno, ha dejado de ser colectiva. No se identifica con la autenticidad en absoluto. La posverdad ha secuestrado la verdad para construir una realidad a su estilo y manera. Para volver a una verdad sabida o conocida deberíamos esforzarnos en contrastar la información , averiguar la fiabilidad de lo que nos señalan . El pensador y filósofo J.Pigem en su libro sobre Pandemia ha realizado un análisis interesante para desmontar muchas ideas que se nos difunden desde la ciencia , pero esto lo podemos aplicar a casi todo. No es tarea fácil porque ese secuestro está amparado por el poder de quienes buscan sus intereses. Claro uno se pregunta si cuando la verdad no existe es posible existir con algo de sentido y vivir . 

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