¿qué nos transforma como sujetos ?

Empezar en la vida como un relato con el que nos atrevamos a decir quienes somos identifica todo aquello que hacemos, pensamos, sentimos ,y en definitiva vivimos como algo definido. En una posible ontologia histórica de nosotros mismos podemos descubrir esos mecanismos que nos transforman como seres humanos , o sea, sujetos. Esta claro que la fabricación de esa subjetivización se consolida en el interior de esos mecanismos que nos derivan a lo largo de la vida sean educativos , familiares, terapeúticos, sociales, políticos, artísticos , ..  Esta mirada foucaultiana permite una mirada como self hacía lo que proyectamos de nosotros mismos. El concepto de tecnologias del yo de Michael Foucault  se situaria en el autoconocimiento , autocontro, autovigilancia, autonomia, autoconfianza, autoproyección, autoestima, como intereses donde la persona o sujeto se relaciona consigo mismo con el proposito de consolidarse a si mismo , de regularse o gestionarse como tal. En esta clave esta la idea de la autoayuda que en el fondo busca esta cura de si  donde el sujeto se situa frente a su propio espejo para identificarse con eso que hace, dice , piensa, habla, actua, relaciona..Esa posibilidad tal como el propio Sócrates decía de ser dueño de uno mismo, de parresia, de relación con la verdad que nos define podría ser aquello precisamente humano que nos dibuja y nos condiciona. Esa condición humana permite decirnos que lo que nos humaniza realmente es esa capacidad de reflexión con nosotros mismos a diferencia de otras partes menos reflexivas, o esa conciencia de nosotros mismos . Aquí pués radica la diferencia entre unos yoes que son incapaces de adquirir cierta conciencia de si mismos precisamente por una patologia que les impide bajo sus narcicismos sentirse a si mismos como algo propio y personal en lugar de algo ajeno que les resulta indiferente. Ese autoconcepto de lo que somos precisamente hoy genera el principio de identidad que nos normativiza y nos relaciona con los demás. Por consiguiente cuando el sujeto distorsiona este autoconcepto su normativización de su identidad queda desplazada totalmente y entonces su nivel de autocontrol, autoestima, autoimagen se disuelve en su propia nebulosa. 
De esta manera la articulación de los discursos mismos que el sujeto realiza permite encontrar estos parámetros y la relación que este adquiere con la imagen de si. La idea que nos configura como yo es histórica , contingente, en tanto nos comportamos como esta misma idea.  Sin embargo no sólo esa idea de lo que somos resulta contingente sino también nuestra propia persona como tal. Y aquí radica la importancia de esos comportamientos nuestros frente a los demás como frente a nosotros mismos como resultado de esa experiencia que tenemos con nosotros mismos. ¿cómo si no se podría entender la persona amargada, solitaria, gruñona, inquisitiva, quisquillosa, al margen de su experiencia vital como persona ? Esa forma de subjetividad de lo que somos nos indica los pasos que de forma singular han dado nuestra autoimagen , nuestra identidad misma. Sea la sexualidad , sea la propia idea de relación con los demás nos situa pués en esa transformación como sujetos de nosotros mismos . Una cierta oleada de puritanismo que en ciertas series de cine se empiezan a mostrar señalan esas subjetividades de hoy que desean alejarse de prácticas de comunicación corporal y física .