Buscar este blog

domingo, 25 de noviembre de 2018

UN DÍA EN LA VIDA DEL ZOMBI FILOSÓFICO

Parece que ha perdido la conciencia. No responde más que de forma automática , mecánica, repetidamente . Se aleja de todo aquello que le indique que debe darse cuenta de lo que le pasa y como le pasa eso . Precisamente eso que le pasa no lo reflexiona, ni lo procesa . Vivir es andar, comer, mirar la televisión, estar enganchado a la pantalla del móvil, pasar el tiempo mirando pantallas en el ordenador . Se trata de encontrar información , precisar respuestas a estímulos que se le presentan sin más. 

Seguramente no sabe que es un zombie , un ser sin mente, sin conciencia , que se mueve con un cuerpo sin más y responde a sus necesidades más básicas. Puede que la droga que probó hace años que llevaba el mismo nombre y comía el cuerpo a pedazos ahora esté instalada plenamente . Sin embargo se pregunta si realmente es eso lo que le da unas características como zombie. 

Empecemos por el recorrido que le ha llevado a ser llamado por alguien ajeno : Oye, tu eres un zombie !!!!!!!

¿Cual es la relación entre su cuerpo y su mente ? ¿Como se relacionan cuando automatiza cada vez más una vida no vivida , una vida no puesta a examen , una vida sin sentido, sin significado , sin cuestionarse todo lo que hace, piensa, habla, .. ? 

Los hechos físicos son diferentes a los hechos mentales , eso es así o no lo es se pregunta una y otra vez . 

                 



Jorge Fernandez Gonzalo  en su libro "Filosofía zombi"  nos dice que este tipo de pensar lo que nos sitúa és en el desgarro. Por eso nos señala no hay identidad, cuerpo, estructura, identidad, en una relación con lo impensable. 

La deshumanización ha llegado incluso en la música con el famoso triller de Michael Jackson 


            


El muerto viviente se presenta como un alienado, como un sometido a la ley , a una naturaleza superior que lo convierte en un ser incapaz de ser el mismo, incapaz de tomar decisiones. 

En el relato inicial que hacíamos el zombi es sólo cuerpo . Vivir es tener cuerpo antes que nada e incluso utilizar este receptáculo para desaparecer, como si se tratara de olvidarse uno de si mismo en forma de anorexia, bulimia, de abandono de lo que uno es. El fenómeno zombi pues convierte al sujeto en un objeto de los otros, de psiquiatras, psicólogos, de coachs , de observadores del desvanecimiento de lo real. Lo real se desvanece puesto que el consumo nos convierte en zombies adocenados en cuerpos compulsivos, inapetentes, anómicos, alienados. 

Se puede hablar sin ser consciente de que lo estamos haciendo . Un chucho no sabe a chucho, un croisant no sabe a croisant, un donut no sabe a donut porque no hay relación mental alguna. Se actua sin estar consciente de que se actúa . 

El epifenomenismo y el emergismo precisamente sostienen que la consciencia es accesoria , no es realmente un elemento dual o compuesto de forma igual que el cuerpo 

La neurocientífica Kathes Evers sostiene que si hay actividad en el cerebro que se puede detectar hay consciencia sobre lo que se hace y se piensa.. 


No hay comentarios:

PUBLICIDAD GRATUITA