Todo lo que sobra merece ser quemado. Así nada se desperdícia ni nada parece ser un desperdicio. La propia vida se nos presenta engalanada. Con la mesa bien dispuesta para ser fotografiada. Ensalada de tomates, lomo embuchado, tortilla de patatas, jamón, pinchos de tomate cherry con queso feta, ..... Golosina , golosa para los comensales. Se sientan sin embargo para mirar a lo lejos lo mucho que tienen por comer y así antes de contrariar sus deseos a causa de la publicitat virtuosa que acusa cualquier exceso de indigestión , mirar el reloj para distribuirse el tiempo. Saben que no tienen todo el tiempo que querrían pero disponen de unas horas para apropiarse de sabores nuevos, olores perfumados, texturas diversas, .... Juego , juego, juego.... Nadie habla. Sólo se comen y se escucha el masticar de los dientes que salivando construyen un bolo "quimo" para deleitar al cuerpo. Miradas , acentos , rescates, pasiones, asaltos sin prisa pero tampoco con parsimonia irreverente. A menudo una tos seca, un súbito gloteo que recuerda que alguien se encuentra bebiendo. Silencio. Nadie habla. Hay prisa ahora. La noche avanza.
La mesa se va quedando desierta. Desnuda. Despojada. Ya no hay acosadores sólo una simple acusada. La mesa. Luego tanta desnudez somete a los ojos de cada cual a volver la vista atrás para buscar la puerta de salida. Sin sus ropajes la mesa se queda allí. Desierta. Apartada de todos y vacía de nada. No sobra nada, no se ha dejado nada. Los desperdicios no existen. No hay opulencia sólo hambre. Vinieron 48. Almas. Seres. Hombres y mujeres. No habían comido ni bebido desde hacía una semana. Por eso no hablaban, sólo comian. No tuvieron tiempo de despedirse. Ni un adiós... Alguien pudo escuchar ya os vais princesa ?
1 comentario:
Suposo que aquesta foto ha estat feta per tu. Resulta maca per a la vista i per als sentits. En una paraula, podría dir que és un RECLAM!
Pel que fa al text, haig de dir que m'ha commogut!
Has viscut alguna experiència com la que descrius?
Judith M.
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